“En la Comunidad Valenciana hemos creado un modelo de centro tecnológico muy adaptado a las necesidades de las empresas que, en nuestra región, son más pequeñas que la media del país, están muy disgregadas geográficamente y pertenecen a sectores muy diferentes”. Así se ha expresado el director de REDIT, Gonzalo Belenguer, durante su participación en el congreso internacional “Europa y América Latina: socios para el fomento a la mypyme”, que se ha celebrado los días 22 y 23 de mayo en Santiago de Chile.
Belenguer ha explicado “que la Red de Institutos Tecnológicos de la Comunidad Valenciana (REDIT) es la primera red de apoyo a pymes de España”. Asimismo, ha repasado los últimos datos económicos de los once centros que trabajan a nivel regional y que dan muestra del buen trabajo que realizan ya que “nuestros 1.600 trabajadores del ámbito científico-tecnológico llevaron a cabo 840 proyectos para más de 12.000 empresas cliente y 5.100 empresas asociadas”.
En el marco de las mesas de conversación sobre diseño y gestión de centros de transferencia tecnológica, en el que han participado representantes de redes de centros tecnológicos de España e Italia, el director de REDIT ha realizado una ponencia sobre revalorización de sectores tradicionales y fortalecimiento de la mipyme. En este sentido ha explicado cómo el sistema de apoyo a la innovación en la Comunidad Valenciana, según demuestran los datos, “ha conseguido fortalecer a las empresas y facilitarles el que ganen dimensión y también ha sido muy beneficioso para el territorio ya que, por ejemplo, los centros han sido auténticos tractores para atraer tanto fondos públicos nacionales como europeos”.
CEPAL
Este encuentro internacional ha sido impulsado por la Comisión Económica para América Latina y Caribe (CEPAL), organismo dependiente de la Organización de las Naciones Unidas, responsable de promover el desarrollo económico y social de la región. La iniciativa ha sido cofinanciada por la Unión Europea, en el marco del proyecto Euromipyme, que busca generar intercambios entre instituciones de América Latina y Europa en dos áreas: transferencia tecnológica y políticas para la transformación digital de las mipymes.
El objetivo ha sido crear un espacio para el diálogo de alto nivel para reflexionar sobre los nuevos desafíos de la cooperación y estimular el intercambio de experiencias entre instituciones europeas y latinoamericanas, en un entorno cada vez más complejo donde las empresas de menor tamaño deben superar la visión tradicional para sumergirse en el cambio tecnológico.