En España son casi 20 millones las personas que sufren, al menos, una enfermedad crónica. De ellos, diariamente un notable número debe acudir a un hospital para que se les administre la medicación correspondiente.
Pero hoy en día, la asistencia a hospitales supone un riesgo aún mayor para la salud debido a la pandemia generada por el COVID19.
Las iniciativas ciudadanas y empresariales de colaboración se suceden en todo el mundo para hacer frente a los efectos del coronavirus, como la elaboración de mascarillas de tela o la de pantallas protectoras para sanitarios.
En esta línea, en ITI han puesto a disposición del sistema sanitario un software de optimización de rutas para el reparto de medicamentos.
RoutingMaps asigna servicios y rutas a cada vehículo teniendo en cuenta restricciones y necesidades: pacientes a visitar, disponibilidad de vehículos, accesibilidad, etc… La principal ventaja es que se consigue es llegar al máximo número de pacientes, con el mínimo número de recursos y en el menor tiempo posible.
El servicio del software se ha orientado por un lado a limitar la movilidad de los enfermos crónicos, evitando así su contagio por COVID19, y por otro, liberar al personal sanitario para que puedan dedicar el máximo tiempo a atender otras necesidades sanitarias.