INESCOP, con el apoyo del IVACE, tiene en marcha una nueva línea de investigación con la que quiere obtener nuevos materiales más sostenibles y seguros para el calzado infantil que permita sustituir algunas sustancias que son perjudiciales.
Al mismo tiempo, el centro tecnológico está estudiando cómo ajustar el calzado a las necesidades del pie infantil, ya que de esto depende el correcto crecimiento del pie y la ausencia de emisiones durante la etapa infantil.
Estas investigaciones forman parte de las 11 acciones que el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE) ha respaldado a INESCOP en 2018 con una subvención de 2 millones de euros y con financiación europea.
«Se trata de acciones -ha señalado la directora general del IVACE, Júlia Company- destinadas al fortalecimiento del sector y que cuentan con la necesaria colaboración de las empresas, a quienes van dirigidas las investigaciones de los centros tecnológicos”. “Hoy por hoy- ha añadido Company- los institutos tecnológicos son el primer proveedor de servicios de I+D+i empresarial y de difusión de la innovación en la Comunitat, algo de lo que se ha de aprovechar el tejido empresarial”.
Pese a que la Comunitat Valenciana es la primera región española productora y exportadora de calzado, sus empresas, en su mayoría PYME se encuentran en competencia directa con empresas de países como Francia, Alemania e Italia “ lo que hace más necesario contar con productos con alto valor añadido”.
Fabricación avanzada y sostenibilidad
En materia de fabricación avanzada INESCOP acerca soluciones tecnológicas adaptadas a las necesidades de las empresas. Es el caso de la impresión de hormas en 3D mediante fabricación aditiva para la fabricación de muestras; el desarrollo de diferentes sistemas robóticos para la manipulación de las piezas de piel que conforman un zapato o una aplicación móvil que obtiene tu talla exacta de pie en función del fabricante.
La industria de calzado se encuentra inmersa en un proceso de transformación hacia un modelo de economía circular, en este sentido INESCOP trabaja en la revalorización de residuos de piel acabada mediante la obtención de colágeno y su introducción de nuevo en los procesos de curtición y en el desarrollo de pieles con facilidad de biodegración que minimicen el impacto ambiental.
Tecnologías innovadoras y saludables
Con el fin de adaptar las propiedades del calzado al usuario y obtener un calzado más funcional, INESCOP trabaja en el desarrollo de un calzado termorregulador que contribuya a la reducción del estrés térmico, el cual puede afectar al rendimiento del usuario, su deambulación, así como a la salud del pie.
Al mismo tiempo, y debido a la irrupción de nuevos materiales en la industria de calzado, INESCOP tiene el reto de avanzar en las tecnologías de unión, tan importante en esta industria, además de buscar procesos de pegado más ecoeficientes y sostenibles, tanto con el medio ambiente como con el operario.