AENOR valida la herramienta informática para el cálculo de la huella de carbono del calzado de cualquier modelo de calzado teniendo en cuenta todo su ciclo de vida, desarrollada por INESCOP.
INESCOP, Instituto Tecnológico del Calzado y Conexas, ha desarrollado una herramienta informática que permite calcular la huella de carbono de cualquier modelo de calzado, teniendo en cuenta todo su ciclo de vida, desde la “cuna a la tumba”, esto es, desde la obtención de las materias primas, hasta que el calzado se ha usado y desechado.
La Asociación Española de Normalización y Certificación (AENOR) ha validado esta herramienta para el cálculo de la huella de carbono de calzado de acuerdo a la Norma ISO/TS 14067 de Huella de Carbono de Productos.
Para ello, AENOR se ha basado, entre otras cosas, en los resultados del test piloto realizado en la empresa de calzado de trabajo DIAN, consistente en calcular y verificar la huella de carbono de uno de sus modelos de calzado, haciendo uso de la herramienta, denominada “CO2Shoe”. Como resultado del mismo, la entidad de certificación ha concedido a la empresa el certificado AENOR de la Huella de Carbono de Producto. En conjunto, AENOR ha concedido más de 200 certificados de Huella de Carbono que acreditan la veracidad del cálculo, reducción o compensación de las emisiones de gases de efecto invernadero resultado del ciclo de vida de un producto o de la actividad de eventos, organizaciones y servicios.
Con esta herramienta se cuantifican los gases de efecto invernadero, equivalentes a dióxido de carbono “CO2” (huella de carbono) que se producen como consecuencia del proceso de fabricación de un par de zapatos y de su embalaje. Nos encontramos pues ante una herramienta de gestión ambiental y energética que identifica los principales “puntos calientes” del sistema, es decir, aquellos materiales y etapas del proceso productivo que conllevan un mayor impacto ambiental.
El uso de la herramienta es sencillo e intuitivo, ya que incorpora los principales materiales que pueden aparecer en el calzado, así como los factores de emisión correspondientes (coeficientes que transforman datos de actividad, como el consumo de energía, en emisiones). De esta forma, lo que se tiene que hacer es introducir las cantidades de los materiales empleados y los consumos realizados (agua, energía, etc.) y de forma automática la aplicación proporciona el resultado del producto analizado, en forma de CO2 calculado por par de zapatos.
Aunque la principal ventaja que puede suponer para las empresas el uso de esta herramienta sea la de mejorar ambientalmente, lo cierto es que puede ser empleada como herramienta de ecodiseño, herramienta de marketing para mejorar la imagen de la marca (permite acceder al etiquetado de huella de carbono de producto), como elemento de diferenciación con respecto a los competidores, y para adelantarse a exigencias regulatorias o incluso de clientes, además de poder ser una ventaja en procesos de contratación pública e incluso utilizarse para la reducción de costes.
Este desarrollo ha sido posible gracias al proyecto europeo LIFE CO2Shoe “Huella de carbono de calzado”, en el que INESCOP está trabajando como coordinador junto a centros tecnológicos de otros países de la Unión Europea (Polonia, Portugal e Italia), así como con la Confederación Europea del Calzado (CEC) y la Federación de Industrias del Calzado Español (FICE). El proyecto cuenta con el apoyo parcial de la Unión Europea a través del programa LIFE y tiene prevista su finalización en septiembre de 2017.